Y llegó el momento de la verdad, tras más sesiones de telemetría y más mini-clases teóricas, por fin nos subimos al bicharraco que os enseñé al principio: un F1 de verdad. En esta foto y en las siguientes, la cara que tengo la verdad es de respeto a lo que voy a hacer, porque los que nos dieron las clases se encargaron de que se lo cogiéramos.Si, si ese soy subiendo al bicho
Figueiras, islas Cíes
jueves, 19 de julio de 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario